
Según dijo en una entrevista con Us Magazine, sus comidas no estaban siendo muy saludables.
“Estaba comiendo muy mal, además estaba fumando mucho y me quedaba despierta hasta muy tarde. Esa rutina debía cambiar”, dijo la actriz.
Aunque su dieta se basa en cambiar completamente sus rutinas alimenticias, confiesa que siente mucha debilidad cuando ve a una hamburguesa.
“Siempre me dan ganas de comerme una hamburguesa, pero pienso en qué puedo engordar, y así me rechazarán. Ante eso se me pasa cualquier antojo”, finalizó entre risas.
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